Olvido
Quisiera yo saber, si puedo olvidarte para siempre. No llegaste de origen, y sin embargo desde que apareciste, ya no pude yo dejarte.
No es que quiera yo hacerlo, simplemente es que hay días que el dolor nunca termina. Te has ido y yo lo sé, y el buscarte es imposible; un olor o un sabor que compartimos, invoca tu fantasma junto a mí.
Te persigo en las sombras, en los accesorios de la mesa; en los pocos objetos que dejaste, en los muchos recuerdos que creaste. Seguir es necesario, olvidarte, lo confirmo, es imposible.
Al mirar en el espejo los adornos que dejaste me doy cuenta; no es que tu recuerdo no me deje, yo le he puesto las cadenas y lo he atado a mí ser.
Tú me amaste y me pides que te deje, sin embargo aún no puedo; necesito una respuesta, sin embargo aún no conozco la pregunta.
Ahora veo lo imposible del olvido, y solo espero ese día, en que nos volvamos a encontrar.
Gabriel Soberanis