¿Y Qué Pasará Entonces?
Desde hace algunos meses, un fenómeno que ya había observado bastante, me comenzó a inquietar y molestar un poco más; ya que debido a lo que se encuentra implícito en él, puede volverse algo de cuidado.
Si me acompañan, quiero que revisen las siguientes frases sobre algunos tópicos, y después de esto, se tomen unos segundos y formulen su propia teoría, tal vez estamos viendo el mismo problema.
Hago notar, que todos los temas y comentarios que a continuación están escritos, son copia directa; no contienen ninguna edición (solo la omisión de los nombres específicos), y no han sido corregidos ortográficamente, ya que esto también es muy relevante en las conclusiones más adelante expuestas.
Primeramente, esto es sobre un “cantante” más, que ha decidido entrar a la tendencia de eso llamado “reggaetón”.
“Extraño tu estilo; pero siempre es bueno cambiar.”
“sigue haciendo esto…. Me encanta que te atreves a lo differente ignorando opiniones.”
“Una más que hace cosas por moda. Lo que sea por comer” REPLY “En el disco habra de varios generos.”
“En el arte también hay diversidad y no se trata de etiquetar.”
“Te falta conocer mucho sobre este nuevo material”
“Haha Cuando saques al mercado una canción y en 24 horas conquistes ➕1M de espectadores únicamente en YouTube! Entonces tus comentarios negativos podrían tener un poco de Valides. Por el momento estás obsoleto”
Por otro lado, lo siguiente son las declaraciones de una “personalidad”.
“No era de eso la columna y no es una carta pero bueno… ojalá a las demás cosas que escribo les pusieran el lismo interés”
“Alguien que no aburra chingao…”
“Si como me visto, peino, paro, hablo, maquillo, pienso, escribo o vivo no te gusta… me harías el favor de no hacérmelo saber?”
Lo primero que puedo notar es que hoy, más que nunca, la idolatría se encuentra en un punto demasiado peligroso; la objetividad, la autocrítica y el sentido común, sino han muerto, han dejado casi de existir.
Lo siguiente que pude notar es como de la forma más autocomplaciente la mayoría de estos comentarios justifican, casi de manera inmediata cualquier postura de sus ídolos, sin posibilidad de análisis o cuestionamiento.
Ahora, es verdaderamente preocupante el observar que hoy, tener más seguidores, “likes” o visitas, es fundamental para validar cualquier cosa.
En este punto, quiero detenerme por un instante; no dudo que algunos no verán nada de malo en todo esto pero… Si bien lo que a continuación mencionaré como ejemplos parece irreal, extremo o fuera de lugar quiero que recuerden que en su momento era algo también “sin importancia”.
Ejemplos de personas con millones de seguidores que los apoyaban: Hitler, Hugo Chávez
“Tendencia” que tiene millones de personas alrededor del mundo en sus filas: PEDOFILIA ¿Es válida porque muchos gusten de ella (igual que el reggaetón)?
Pasando ahora a la “artista” y sus opiniones; es increíble notar lo siguiente:
“No era de eso la columna y no es una carta…”. Aquí, es hilarante ver como la misma artista se ha dado cuenta que ni sus mismos seguidores entienden de qué hablaba o a que refería su columna; los “me gusta”, los elogios exacerbados e ideáticos, son solo la muestra de una reacción mecánica sin raciocinio alguno.
Sobre su comentario “Si como me visto, peino, paro, hablo, maquillo…”, creo habrán notado lo mismo que yo. Aunque quisiera entenderla y justificarla, no es posible; ella ha decidido ser una figura pública y eso, por la misma naturaleza tanto de la palabra como de elección, prácticamente le “prohíbe” solicitar esa falta de intromisión en: su actuar, vestir y hasta hablar. ¿Injusto? Solo cuando les conviene; mientras los comentarios son positivos, las muestras de fanatismo son exageradas y reciben toda clase de beneficios, este tipo de solicitudes de respeto a la intimidad desaparecen, ¿Verdad?
¿Y cuál es el problema entonces? La falta de congruencia, inteligencia, valor, determinación, crítica, honestidad, etc., de estos: fanáticos, artistas, figuras públicas y gente sin rostro ni nombre (solo con pseudónimos y avatares); es una bomba de tiempo. Tal vez me dirán que esto solamente es en las redes sociales y en temas sin una verdadera importancia; lamentablemente, hasta el día de hoy, no he conocido a una sola persona que actúe diferente a su forma de ser dependiendo la situación. El cobarde, siempre se escudará en otros, en mentiras y escusas, e igualmente el honesto lo hará en la verdad, y el actuar frontalmente.
Es por eso mi pregunta. Cuando estos personajes tengan que tomar una decisión o ser responsables de su actuar en situaciones reales y “serias”… ¿Qué pasará entonces?